lunes, 23 de julio de 2018

ORA PRONOBIS (Ora por nosotros)

Oh Señor! No soy quien para poderte reprochar, porque mi bien lo sabes tú...
Que creo en tí con devoción y lealtad.... Ora pronobis. 

Ayer por la tarde a lo lejos de mi habitación escuché la voz de Luis Miguel, como casi no está de moda... y ví que estaba la película de "Ya nunca más" y llegué justo cuando empezaban estas palabras: ¡Oh Señor, no soy quien para poderte reprochar!, le pedí alexa que fuera corriendo y conociera a Luis Miguel de chiquito cosa que cero le dio emoción e incluso me dijo: ya vas a empezar con tu luis miguel (jajaja). 

Pero este escrito va más alla de mi querido Luis Miguel, ayer pensé que tenía  bastante que no escribía y que a lo mejor había alguien preguntándose como ibamos... Y aquí va.

Desde que la dieron de alta en enero por ahí hemos pasado algunos detalles de salud, una bolita en la cabecita que le tuvieron que quitar pero que gracias a dios era algo asi como un quiste, eso me puso un poco mal, estresada, temerosa, angustiada, triste, cuando pensé que habíamos superado todo llegó esto, pero también así como llegó se fue... Sufrimos un par de semanas (bueno yo), y ella tan valiente como siempre se sometió a esa biopsia ambulatoria que como herida de guerra le dejo un pequeño peloncito en su cabeza y nada más.

Pero la realidad es que la vida es buena, es bella, ahora no nada más SOBREVIVIBLE sino VIVIBLE en toda su extensión, la veo enojarse, reirse, correr, caerse, desvelarse, emocionarse, aburrirse, si todas estas cosas como una niña tremendamente NORMAL. Y eso que para muchas es normal para mi es la más hermosa normalidad que existe, ahora ya de repente contesta, se intolera y externa FUERTEMENTE sus opinIones, es una niña muy graciosa, un tanto rebelde, apasionada, sensible, es PERFECTA. 

En estos días que ha vuelto la calma me he metido en temas de nutrición y salud, ando como niña con juguete nuevo intentando que coma de todo: betabel, quinoa, pitahaya, y la respuesta es que me batea la mayor parte del tiempo pero estoy segura que con dedicación y constancia pronto haré que coma mejor... Mientras tanto mi hermoso diego se come absolutamente todo lo que le doy y anda presumiendo que le gusta la quinoa... Ha pasado tanto, y tan poco tiempo, hace apenas seis meses nos dijeron que era momento de volver a ser felices y disfrutar, parece tan bonita la frase que uno pensaría regresa como un golpe de viento y no es así... esta regresa poco a poco aún con miedos y con incertidumbre pero con la inmensa fe de que ésta será nuestra vida: una vida donde mis hijos son felices, donde mi esposo y yo a tientas y a errores nos volvemos a encontrar. 

Una vida donde el tío gerardo está en paz con Dios nuevamente, donde los abuelos son felices, donde Diego vuelve a ser importante y donde ya no es el hermano que acompaño sino un ser individual que requiere de atención, probablemente más que Alexa. 

Alexa es mi vida no lo puedo negar, hasta ahora habíamos sido estrellas que orbitaban alrededor de ella y eso poco a poco tiene que cambiar, cada uno debe volver a su lugar y a vivir la vida plenamente, no la de ella, sino la que a cada quien nos tocó. Ese debe ser mi propósito... hacer de la vida de Diego una vida más plena, más feliz, de mayor atención. 

He aprendido mucho estos 6 meses, me inscribí hasta en un curso de trofología, de alimentación saludable, y a veces a mi alrededor todos me ven como muy interesada y muy intensa , y es que encontré sin que ellos lo sepan UN ARMA INFALIBLE, y es que ante el MIEDO no hay nada mejor que tomar ACCIONES y esta es la mía... No puedo controlar los designos de dios, no puedo pedirle que firmemos un contrato en donde el me garantice que todo estará bien, que esto no regresará, no puedo pedirle que me permita ver al futuro y ver que le depara a mi hija, pero no nada más a ella, nadie tiene la vida comprada, pero si puedo alimentarla mejor, hacer de su vida una vida tan saludable que de nuestra parte no quede espacio para el cáncer ni para alguna otra enfermedad, a menos de que así el lo decida.... así que hoy mi vida es inmensamente feliz: una vida donde todos somos importantes: la ternura de mi papá, el cuidado inmenso que nos da mi mamá, las risas y el amor del tío gerardo (mi hermano), la compañía de Kitzía (mi hermana de vida, cuñada), mi Diego (el compañero empático y nuestro rayito de luz), mi esposo (mi compañero de guerra), yo (que algo aportaré) y mi sol... Mi Alexa hermosa.

Oh Señor! No soy quien para poderte reprochar, porque mi bien lo sabes tú...
Que creo en tí con devoción y lealtad.... Ora pronobis. 

Tal vez debería tomar estas palabras como mantra, y no porque las canta mi querido luis miguel, sino porque así he vivido los últimos 4 años de mi vida.... Mi alexa empezó este camino teniendo dos años y medio y hoy tiene 6, se graduó del kinder y está a punto de entrar a la primaria, y es una niña tan hermosa... que no soy nadie para reprochar a Dios el camino que le ha tocado vivir, porque se que nuestro bien lo sabe el y que con golpes, con heridas de guerra, con miedo, con incertidumbre CREO EN EL CON DEVOCIÓN Y LEALTAD. 

Les dejo una foto de mi hermosa realidad y si tienen un momentito recen por nosotros para que esta felicidad nos dure mucho mucho tiempo. 

A mi kuka hermosa ÉXITO en la primaria y que vengan todos los momentos que con SALUD te tocan vivir. TE AMO....




jueves, 5 de abril de 2018

Hola,

Tantos meses sin escribir, escribo ahora en los Cabos, observando un mar muy azul y viendo cómo se rompen las olas en las rocas. ¿Que ha pasado desde hace casi un año? Bueno eso que tanto añoreé, que tanto le pedí a la vida se me dio... Alexa está en vigilancia desde el 7 de enero de este año. No máas quimios, fueron más de 120... no más tratamientos, no más cáncer.

El día que nos dieron la noticia nos citaron muy tempranito en el hospital, tenían que hacerle una biopsia de médula, el PET,  varios estudios que durarían todo el día , la doctora me repetía por teléfono, por mensaje, a todos horas que esto era solo un trámite para terminar el protocolo, que Alexa estaría bien y que nuestra vida volvería a ser la de antes... (ya después regresaré a esta frase).

Con todo el miedo del mundo la acompañé como siempre, ella sabía que tocaba día de chicle (anestesia) y si algo siempre odio fue eso, la anestesia y ella tenían un pleito ya de varios años, así que fui con ella como siempre tome su mano y vi sus ojos llenos de miedo cerrarse una vez más, mientras yo pensaba falta tan poco para dejar esto atrás,

Así que tras varios procedimientos y más de tres horas, la doctora salió y me dijo: el previo de la médula está bien, vayan a desayunar y en cuanto pueda les mando el resultado, así que ya desayunando recibí una foto, era la médula de Alexa con un corazoncito y un ¡Felicidades!, mi hija se graduó, se graduó de esta prueba que no elegimos, qué más bien nos eligió a nosotros, se graduó de los cuidados excesivos, del dolor, de las agujas, de los hospitales, se graduó...

Fui muy ingenua al pensar que ahí terminaba nuestra historia con el cáncer, gracias a Dios dejó el cuerpo de Alexa, pero de donde todavía no se va es de nuestras vidas, hemos ido reconstruyendo  nuestras vidas, pero es que dejo tantos escombros que remover que a veces cada uno de los involucrados no sabemos cómo hacer. Aún no se me va el miedo de escuchar me duele el estomago, la cabeza, o sentir que tiene temperatura es como si alguien golpeara varias veces mi estomago y no se como defenderme, es niña se va a enfermar de otras cosas, al fondo escucho la voz de la doctora recordándome esa frase, pero la mayoría de las veces la ignoro y dejo que el miedo se apodere de mi.

Necesito hacer tanto aun con mi maltratado corazón, necesito aprender a ser madre de Diego, porque durante mucho tiempo no fue mi prioridad, necesito volver a ser esposa de Alejandro y verlo no como a un compañero de lucha sino otra vez como el amor de mi vida, necesito andar por la calle con una sonrisa de oreja a oreja que salga del corazón y no solo sea algo que acomodo en mi cara.

Necesito volver a vivir sin miedo, tal parece que el dolor es como una adicción  y es difícil decirle adiós , necesito enseñarle a Alexa a través del ejemplo que esta enfermedad definió nuestro pasado pero no definirá nuestro futuro,  necesito gritarle a la vida que nada me debe, que si algo le debía ya se cobró y que por fin estamos en paz.

Quiero enseñarle a mis hijos a vivir, a vivir de verdad, iplenos, felices, positivos, sanos, quiero hacer tantas cosas... pero a veces no se si gana el miedo o mis ganas de vivir diferente. Atrás quedaron los por qués... ahora estamos en los para qué, y sin duda la respuesta es para SER Mejores personas, más humanos, más empáticos, para disfrutar la vida sin pensar en el futuro y más bien vivir el presente.

Dejar de tener expectativas de cómo debemos vivir y realmente vivir, dejar de pensar que mañana haré algo porque nadie está seguro que ese mañana llegará, vivir en Dios y pensar que él no se equivoca, que sus tiempos y enseñanzas son perfectos y vivir agradecida porque eso que tanto le pedí me lo concedió... ver a Alexa sana, feliz, y viviendo como niña, nada más como una niña más...

Si alguien me preguntara qué aprendí de estos más de 1000 días de acompañar a Alexa por su prueba, le diría que aprendí que no se vive del pasado ni haciendo planes a futuro, que se vive el ahora porque es lo único que realmente tenemos, les diría que siempre hay alguien que tiene un dolor mayor que el de uno, que no somos los únicos con pruebas, que detrás de la sonrisa que menos esperas se encierra una historia de vida que nunca imaginaste, que los lujos, el dinero, la comodidad importan porque te ayudan a proveer los medios para regresar la salud, pero que al final el único que decide es Dios.

Alexa en estos momentos está por terminar su último año de Kínder, tiene un niño que le manda cartas y extrañamente le canta la mochila azul, tiene ganas de meterse al mar y no salir durante todo el día, tiene ganas de jugarle bromas a su hermano y reírse de él cada que le pasa algo chistoso, Alexa tiene hambre de vivir y con la ayuda de Dios se irá comiendo al mundo cada día de su vida...

Mi proceso creo que será más lento, recuperarme del miedo y la incertidumbre como los adictos me tomara un tiempo, nunca volveré a ser la Lorena que recibió la noticia de cáncer en su hija de 2 años y medio, esa lorena ya no está, pero está bien... tiene que surgir con los días una Lorena más humilde, más feliz, más tolerante, más humana, sé que con la guía de Dios un día la sonrisa será otra vez completamente natural y el puro reflejo de la PAZ que un día conseguiré... por lo pronto seguiré caminando cerca de mi hija, besándola cada que puedo,  diciéndole cómo es que respiro con el ritmo que late su corazón, aprenderé a ser mejor mamá de Diego, mejor esposa, mejor hija, mejor hermana y sobretodo un día no muy lejano habré conseguido pegar los pedazos de mi corazón.

No es una frase al viento ni trillada: vivamos hoy, porque tal vez sea el único momento que nos quede ya.,,

A ti que me lees, prometo escribir más seguido, a todas las que rezaron por mi hija, les pido no dejar de hacerlo que estoy segura que Dios escucho tantas voces pidiendo por Alexa que no tuvo otro remedio que decir: aquí está... su salud de regreso porque tanta gente me lo pide. No nos saquen de sus oraciones ni de su corazón.

Ha sido un largo camino, pero verla sonreír, correr y ser feliz ha hecho que todo, incluyendo el sufrimiento, valga la pena. Que Dios guíe nuestros pasos, que Dios trace nuestro camino y que sea el quien me enseñe a vivir otra vez.

Amén
Lorena